La fidelización es importante ya que aporta estabilidad, pero ¿cómo podemos fidelizar a los clientes en la venta directa con Cristian Lay?
Si logras fidelizar a tus clientes, estos volverán a comprar los productos que estás vendiendo e incluso acudirán a ti a por las últimas novedades. La fidelización te aportará mayores ventas y de mayor cuantía, permitiéndote así alcanzar un mejor nivel de vida.
Si lo pensamos más detenidamente, la fidelización tiene otras grandes ventajas. Conseguir un cliente es más difícil que mantenerlo. Por lo que en lugar de invertir grandes esfuerzos en alcanzar a nuevos clientes e intentar que conviertan una vez, podemos gastar la mitad del esfuerzo en conservar y fidelizar a los que ya tenemos. Si hacemos bien nuestro trabajo de fidelización, serán estos clientes fieles los que nos generen nuevos contactos comerciales con otros clientes potenciales.
La base de la fidelización es la comunicación y el trato al cliente. Piensa en el trato personalizado que te gusta recibir en una tienda o restaurante. El vendedor se comunica contigo para conocerte un poco más a ti y a tus gustos para poder ofrecerte más rápidamente aquello que estás buscando.
Con estos consejos podrás mejorar la fidelización de tus clientes:
Comunicación
Ten siempre presente el nombre de tu cliente en cada conversación. Mantén conversaciones regulares a lo largo del año. Estas conversaciones no tienen que ser cara a cara, pueden utilizarse múltiples medios y excusas: llamadas telefónicas, email, tarjetas de navidad, de cumpleaños, redes sociales, etc.
Se trata de mantener una cierta “presencia”, que les hace acordarse de ti y tu catálogo CRISTIAN LAY cuando necesiten uno de los productos como los que estás vendiendo. Cuando alguien les pregunte ¿Sabes dónde puedo comprar tal artículo? Se acordarán de ti.
Facilita también múltiples vías de contacto a tus clientes, para que puedan localizarte fácilmente cuando necesiten tus productos. Si no logran ponerse en contacto contigo, quizás recurran a otro vendedor.
Crear un sistema de recompensa
Existen múltiples sistemas de recompensa para fidelizar a los clientes, por puntos, por número de compras, etc. Escoge el que mejor se adapte a tu forma de trabajar. Puede ser tan simple como si sumando todas las compras anuales se llega a X cantidad se regala un descuento a final de año para la primera compra del año siguiente. Si a ese descuento le das una validez de 3 meses, te asegurarás además que el cliente realice una compra en el primer trimestre.
Educación y cortesía
Ejercita tu memoria y procura memorizarte los nombres de todos tus clientes y asociarlos a sus caras. Cuando te cruces a uno por la calle no dudes en saludarlo y preguntarle qué tal le va. En cierto modo esto forma parte de la comunicación, pero también ayuda a reforzar vínculos transmitiéndole a esa persona que no sólo te preocupas de venderle, si no que te preocupas por su bienestar.
Valor añadido
Es importante que conozcas tus productos en profundidad, más allá de su ficha técnica y sus características. Tienes que convertirte en un experto para poder así proporcionar información extra y gratuita a tus clientes. Estos apreciarán y valorarán tus conocimientos. Cuando tengan alguna duda, sabrán a quien recurrir y cuando necesiten comprar uno de tus artículos, acudirán a ti, pues serás el experto que mejor les va a asesorar.
Proporciona por tanto un servicio a tus clientes que vaya más allá de sus expectativas, ofreciéndoles un trato personalizado gracias a un conocimiento y un entendimiento obtenidos mediante el diálogo y la comunicación y recompensando su fidelidad con descuentos o regalos en base a un sistema de fidelización.
En los negocios, como en la amistad, la lealtad hay que ganársela estableciendo motivos sólidos de confianza en base a la comunicación y al trato de tú a tú.